¿Por qué necesitamos un manual de lactancia? ¿Acaso no es algo natural que toda mujer pueda dar de mamar?
En nuestra cultura, cuando una mujer está embarazada, suele concentrar su atención, sus miedos y sus fantasías en el parto. Le tememos al dolor, nos preocupa que todo salga bien. Sin embargo, la lactancia parece ser algo más sencillo, donde no se necesitan herramientas ni expertos profesionales y solamente implica que un bebé tome leche del pecho de su madre… ¿qué tan complicado puede ser?
En Uruguay, en el año 2011, solo el 36 % de los bebés fueron amamantados de forma exclusiva durante los primeros seis meses de vida. Esta cifra, entre otras conclusiones, nos demuestra que la lactancia puede tener diversos obstáculos. Hemos avanzado en extensión de licencia por maternidad y el surgimiento de salas preparadas para que la mujer pueda dar de mamar en horario laboral, en organismos públicos y privados.
Pero, más allá de las conquistas, muy a menudo la mujer se siente vulnerable y no cuenta con las herramientas necesarias para practicarla. Este libro está destinado a aquellas mujeres: a la embarazada que quiere estar preparada para que cuando llegue su momento sepa qué hacer; a la mamá que entiende los beneficios que aporta su leche y tiene la voluntad de dar de mamar pero no puede, le duele, siente que su bebé no obtiene lo suficiente, se siente sola o cree que hay algo que no está bien, pero no sabe qué es. Está dirigido también a aquella madre que trabaja y que a los tres meses de haber nacido su bebé tiene que dejarlo con alguien desconocido, mientras ella procura volver a «ser como era antes».
Un libro que contempla el entorno familiar y un excelente manual para actores sociales, técnicos y profesionales de la salud.